Tanto tiempo sin escribir, que hasta me asfixiaba.

Pues no sé ni el como ni el por qué de porque he vuelto a abrir mi blog y de como estoy escribiendo esta entrada. O quizás si lo sepa... Basicamente estoy hasta los cojones, y no los tengo. Imagínense la situación. El problema es que no sé que me toca más la moral, si leer las mierdas que escribís quejándoos de problemas que se arreglarían con un par de ostias o si las comeduras de olla que me hago sola, que si mi mierda de casa, que si la soledad que si yo que sé. 

Lo único que sé con seguridad es que cada vez me canso más de todo y de todos, y que un día de estos (espero que pronto) esté muy muy pero que muy lejos de aquí.